Tres equipos españoles, tres resultados distintos.

                                Fotografía: Yoan Valat EFE

Esta noche ha habido distinta suerte para los equipos españoles que están en Champions: mientras que el Atlético ha goleado  4-0 al Astana, el Real Madrid ha empatado a 0 en París y el Sevilla ha perdido ante el Manchester City por 2-1.

En París, el PSG salió a morder mientras que los blancos estaban muy seguros atrás, sin apenas ofrecer trabajo a Keylor Navas. A decir verdad, fueron Marcelo, Isco y Jesé por la banda izquierda los que más peligro ocasionaron al rival en el tramo final de la primera parte. El problema es que el balón no quería entrar. Ya en la segunda mitad los blancos se centraron en jugar al pelotazo y probar suerte, a ver si en alguna de esas llegaba el primer gol. Sin embargo, la oportunidad más clara la tuvo Cristiano tras una contra que inició Modric, oportunidad que se fue rozando el palo. Ya en los minutos finales, los parisinos hicieron todo lo posible por llevarse los tres puntos, pero tampoco tuvieron suerte y se llevaron un punto cada equipo. Un punto que sabe a poco.

Mientras tanto, el Sevilla dio en Manchester una muy buena imagen, jugando bien, mandando y convirtiendo a todo un Manchester City en un equipo casi minúsculo. Konoplyanka tuvo una clara ocasión de libre directo que al final no entró, sin embargo minutos después (en el 29 para ser exactos), se redimió, subiendo el primer tanto al marcador. Pero la suerte no estaba del lado de los andaluces porque, pese a su dominio del partido, una acción fortuita hizo que Rami marcase en propia puerta y pusiese el empate diez minutos antes de irse el partido al descanso. En la segunda mitad, el partido seguía igual, hasta que ya en el tiempo añadido, un contragolpe de Touré y la buena definición de Kevin de Bruyne dio la victoria finalmente a los 'citizens’. Un injusto premio.

Mucha mejor suerte corrió el Atlético de Madrid tras meter 4 goles a un tímido Astana en el Calderón. No es que fuese un buen partido de los rojiblancos ya que su juego no tuvo demasiado brillo, pero sirvió para centrarse en las individualidades. Muchas ocasiones tuvieron los colchoneros, todas las que llegaban las remataban. El primero de los goles llegó tras uno de los córneres que forzó el Atleti y que Saúl remató con el tacón ya en el área pequeña. Jackson marcó el segundo en el minuto 28, dos minutos después de que le anulasen un gol. El tercero llegó por las botas de Óliver Torres, con una bonita definición por encima del portero. El otro Torres (Fernando) tuvo dos claras ocasiones y cuando iba a marcar a la tercera, Dedechko se le  adelantó y marcó en propia puerta al intentar despejar. En definitiva, un partido sencillo para los colchoneros, sobre todo si lo comparamos con el próximo: el Valencia.