sábado, 24 de octubre de 2015

El Rayo y el Real Madrid abren la jornada liguera con victorias.

                                Fotografía: Lavandeira JR/EFE

De momento, la novena jornada de Liga se ha saldado con las victorias del Rayo Vallecano ayer por 3 goles a 0 ante un frágil Espanyol, y el 1-3 que ha hecho que el Real Madrid se lleve los tres puntos de Balaídos y se coloque líder en solitario (por el momento). Pero aún quedan muchos partidos.



La 9 jornada liguera comenzó ayer, con un partido que prometía goles: Rayo-Espanyol. Son dos de los equipos más goleados de la Liga BBVA, y el partido no defraudó. Esta vez fue el Rayo Vallecano quien se llevó el gato al agua y los tres puntos los dejó en su casa. Los locales marcaron tres goles a un Espanyol completamente irreconocible, muy lejos del nivel de temporadas pasadas.  El encuentro llegaba a la media hora sin goles, pero fue ahí cuando Enzo Roco empujó a Javi Guerra dentro del área, lo que significaba una cosa: penalti. El encargado de hacerlo subir al marcador fue Trashorras, que no perdonó. Los dos goles restantes llegaron en la segunda mitad, hasta entonces el Rayo seguía dominando el partido, logrando alguna que otra ocasión. Víctor Sánchez fue expulsado por segunda amarilla, lo que dejó al Espanyol en más apuros todavía, y a los vallecanos con mayor superioridad.  En el minuto 30 Bebé condujo por la izquierda un balón que posteriormente puso al segundo palo, donde se encontraba Javi Guerra para rematar y subir el 2-0 al marcador. El tercero también fue obra suya, esta vez por un disparo desde lejos. El partido no tuvo mucho más, salvo una jugada tonta en los últimos compases en la que Tito fue expulsado tras tocar el balón dentro del área, hecho que significaba una segunda amarilla para él.


El Celta y el Real Madrid se enfrentaban en Balaídos dispuestos a llevarse tres puntos que los alejarían al uno del otro en la clasificación (eran los dos líderes junto con el FC Barcelona). El conjunto gallego comenzó tímido, todo lo contrario que el Madrid, que estaba llegando con mucho peligro al área de los de Berizzo. Debido a esto, solo ocho minutos después del comienzo del partido ya mandaba el Real Madrid gracias a un gol de Cristiano Ronaldo. Lucas Vázquez entró por la banda izquierda y centró para el portugués, que no perdonó. Pese al gol, el Real Madrid seguía con la misma actitud, siendo conscientes de que si el Celta tenía los mismos puntos que ellos sería por algo. El Celta también lo intentaba, tuvo bastantes ocasiones de mucho peligro, pero en el Real Madrid está Keylor, que para no variar hizo un partidazo. El segundo gol lo hizo Danilo en el minuto 23, tras un grave error en la defensa del Celta que dejaron un hueco perfecto para que el lateral brasileño definiera con tranquilidad.


En la segunda mitad el partido seguía igual: el Real Madrid creando mucho peligro, jugando muy bien, y el Celta creando también ocasiones que si no llegan a ser por Keylor Navas más de una habría acabado en gol.  En el minuto 57 el partido se puso mucho peor para el Celta con la expulsión de Cabral, el jugador argentino fue expulsado por protestar otra tarjeta amarilla de un compañero. Tras esto, el Celta se creció ante la adversidad y puso en más de un apuro a un Madrid que bajó muchísimo el nivel. Tanto se creció el Celta que en el minuto 85 Nolito, que lleva una temporada espectacular, marcó un auténtico golazo que se fue por la escuadra de Keylor Navas.  Pero este golazo solo sirvió para aumentar su lista goleadora, ya que no consiguieron el ansiado empate y el Madrid terminó de rematar con un gol de Marcelo en el minuto 95. Un gran partido entre grandes equipos, un gran Celta que logró plantarle cara al Real Madrid incluso con uno menos.

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